3/01/2009

figuras retoricas

DEFINICIÓN

Figuras retóricas, palabra o grupo de palabras utilizadas para dar énfasis a una idea o sentimiento. El énfasis deriva de la desviación consciente del hablante o creador con respecto al sentido literal de una palabra o al orden habitual de esa palabra o grupo de palabras en el discurso. Las nuevas investigaciones retóricas y lingüísticas han analizado y revisado la clasificación de las figuras según la retórica tradicional. Es el caso, entre otros, de Roland Barthes, Jean Cohen, Tzvetan Todorov, Gérard Genette y el Grupo µ. Sin poner en discusión el mayor o menor rigor de las diferentes clasificaciones propuestas, para simplificar su estudio puede hablarse de figuras de significación o tropos (antítesis y oxímoron, antonomasia, comparación o símil, concepto, eufemismo, hipérbole y lítotes, ironía, metáfora, metonimia y sinécdoque, paradoja, personificación, sinestesia); figuras de dicción, que afectan a la composición de la palabra (calambur, metátesis, paragoge, paronomasia); figuras de repetición (anáfora, apóstrofe, clímax y anticlímax, exclamación, interrogación, onomatopeya); figuras de construcción, que afectan a la estructura sintáctica (anacoluto, asíndeton y polisíndeton, hipérbaton, pleonasmo, quiasmo, zeugma). Es importante tener en cuenta que, como en toda clasificación, no siempre son rígidos los límites entre unas y otras figuras. Por otra parte, la nueva retórica tiende cada vez más a buscar denominadores comunes en lugar de insistir en la aridez del mero catálogo.

Anáfora
Es una repetición de palabras al principio de un verso o al principio de frases semejantes.
¿Soledad, y está el pájaro en el árbol,
soledad, y está el agua en las orillas,
soledad, y está el viento en la nube,
soledad, y está el mundo con nosotros,
soledad, y estás tú conmigo solos?


Antítesis (Contraste)
Contrapone dos ideas o pensamientos; es una asociación de conceptos por contraste. El contraste puede ser por oposición de palabras (antónimos), frases de significado contrario, etc.
A florecer las flores madrugaron.
Y para envejecerse florecieron;
Cuna y sepulcro en un botón hallaron.

Elipsis
Suprime elementos de la frase (sin perjuicio de la claridad), dotándola de brevedad, energía, rapidez y poder sugestivo.
Por una mirada, un mundo;
por una sonrisa, un cielo;
por un beso. . . ¡yo no sé
qué te diera por un beso!

Epíteto
Es el adjetivo, que colocado delante del sustantivo, expresa una cualidad de alguna persona o cosa.
«el terrible Caín», «la blanca nieve»

Asíndeton
Consiste en omitir las conjunciones para dar a la frase mayor dinamismo.
Acude, corre, vuela,
traspasa la alta sierra, ocupa el llano,
no perdones la espuela,

Polisíndeton
Consiste en usar más conjunciones de las necesarias para dar a la frase una mayor solemnidad.
Ni nardos ni caracolas
tienen el cutis tan fino,
ni los cristales con luna
relumbran con ese brillo.

Aliteración
Es una repetición del sonido inicial en varias palabras de un mismo verso, estrofa o frase.
Si piensas que no soy su dueño, Alcino,
suelta y verás si a mi choza viene
que aún tienen sal las manos de su dueño.

Onomatopeya
Consiste en imitar sonidos reales por medio del ritmo de las palabras.
En el silencio sólo se escuchaba
un susurro de abejas que sonaba.

Hipérbaton
Consiste en invertir el orden gramatical de las palabras en la oración y la ilación lógica de las ideas.
Yo quisiera escribirlo, del hombre
domando el rebelde, mezquino idioma.
«domando el rebelde, mezquino idioma del hombre»
Cerca del Tajo, en soledad amena,
De verdes sauces hay una espesura.
«hay una espesura de verdes sauces»


Hipérbole
Consiste en exagerar las cosas aumentando o disminuyendo la verdad de lo que se dice.
«Tengo un sueño que me muero»

Érase un hombre a una nariz pegado:
érase una nariz superlativa;
érase una nariz sayón y escriba;
érase un pez de espada muy barbado.

Personificación (Prosopopeya)
Consiste en atribuir cualidades propias de los seres animados y corpóreos a los inanimados o abstractos y, en particular, los atributos humanos a otros seres animados o inanimados.
Los invisibles átomos del aire
en derredor palpitan y se inflaman;

Sólo se oirá la risa blanca de las estrellas
Persiguiendo a las sombras por todos los caminos.



Símil o comparación
Expresa de una manera explícita la semejanza entre dos ideas valiéndose de las partículas como y cual.
Murmullo que en el alma
se eleva y va creciendo,
como volcán que sordo
anuncia que va a arder

Y todo en la memoria se rompía,
tal una pompa de jabón al viento.

Paradoja
Es una antítesis superada porque une ideas contradictorias por naturaleza, en un mismo pensamiento el cual generalmente encierra una verdad profunda.
La noche sosegada,
en par de los levantes de la aurora,
la música callada,
la soledad sonora,
la cena que recrea y enamora.

Vivo sin vivir en mí
y tan alta vida espero,
que muero porque no muero

¡Oh soledad, que a fuerza de andar sola
se siente de sí misma compañera!

Perífrasis (circunlocución)
Dice con un rodeo de palabras lo que podría decirse con menos o hasta con una sola.
Allí los ríos caudales,
allí los otros, medianos
y más chicos;
allegados, son iguales
«los que viven por sus manos (por los artesanos) y los ricos.»
«Doméstico es del Sol nuncio canoro» (por el gallo)

Alusión
Es la perífrasis que hace referencia a persona o cosa conocida sin nombrarla.
Aquél sólo me encomiendo,
aquél sólo invoco yo
de verdad,
que en este mundo viviendo,
el mundo no conoció
su deidad

Y cuando llegue el día del último viaje,
y esté al partir la nave que nunca ha de tornar. . .

Eufemismo
Es la perífrasis que se emplea para evitar una expresión penosa u horrenda, grosera o malsonante.
Le señaló la puerta. (por echarlo de casa)
Pasó a mejor vida. (por morir)

Ironía
Da a entender lo contrario de lo que se dice)
¿Y quién duda que tenemos libertar de imprenta?
¿Que quieres imprimir una esquela de muerto;
más todavía, una tarjeta con todo tu nombre y
tu apellido bien especificado? Nadie te lo estorba.

Sarcasmo
Es la ironía misma cuando pasa al tono amargo o mordaz, cruel, insultante.
Gocemos, sí; la cristalina esfera
gira bañada en luz: ¡bella es la vida!
¿Quién a parar alcanza la carrera
del mundo hermoso que al placer convida?
Brilla radiante el sol, la primavera,
los campos pinta en la estación florida:
Truéquese en risa mi dolor profundo . . .
Que haya un cadaver más ¿qué importa al mundo?

Sinestesia
Es la descripción de una experiencia sensorial en términos de otra.
Que el alma que hablar puede con los ojos
también puede besar con la mirada.

Sobre la tierra amarga
caminos tiene el sueño . . .

¡Qué tristeza de olor de jazmín!

TROPOS


Metáfora
Es una identificación de un objeto con otro en virtud de una relación de semejanza que hay entre ellos, es decir, una comparación.
El cristal del agua

Nuestras vidas son los ríos
que van a dar a la mar
que es el morir . . .

Metonimia
Es cuando se da a un objeto el nombre de otro por una relación de causa u origen.
Vive de su trabajo

Respeto las canas

Tener la pluma fácil

Sinécdoque
Consiste en designar un objeto con el nombre de otro debido a que hay una relación de coexistencia.
Un rebaño de cien cabezas.

El hombre fue hecho de barro.

El salón se inquietaba.

Talaron la madera de la región.



Quiasmo
El nombre de esta figura deriva de la letra griega ji, cuya grafía se parece a la de la equis, y consiste en presentar de manera cruzada dos ideas paralelas e invertidas. Siempre son cuatro elementos que se corresponden como los puntos extremos de un aspa: "Cuando tenía hambre, no tenía comida y ahora que tengo comida, no tengo hambre".
Zeugma
Construcción sintáctica que consiste en utilizar una sola vez una palabra, aunque ésta se refiera a otras más del periodo. Un ejemplo de zeugma es el retrato que Miguel de Cervantes hace de Alonso Quijada en el primer capítulo de Don Quijote de la mancha "Frisaba la edad de nuestro hidalgo con los cincuenta años; era de complexión recia, seco de carnes, enjuto de rostro, gran madrugador y amigo de la caza". La forma verbal "era", usada una sola vez con la frase "de complexión recia", está implícita en todos los rasgos que describen (y definen) al personaje.
Existe también el zeugma llamado complejo: al final de una serie de elementos del mismo nivel sintáctico se introduce una función gramatical diferente, que actúa como factor sorpresivo y de ruptura. El cuento "No se culpe a nadie", de Julio Cortázar, se cierra con un zeugma complejo: "...un aire fragoroso que te envuelva y te acaricie y doce pisos"
Calambur
Se produce cuando las sílabas de una o más palabras agrupadas de otra manera dan un significado diferente y hasta contradictorio. Además de su uso literario también se utiliza mucho en retahílas, adivinanzas y juegos de palabras, propios del lenguaje oral, como "Y lo es, y lo es, quien no lo adivine tonto es" (Hilo es, hilo es...); "Lana sube, lana baja" (la navaja). Un ejemplo literario se encuentra en la frase mordaz que utilizó Francisco.
Concepto
Metáfora elaborada, a menudo extravagante, que establece una analogía entre cosas totalmente disímiles. El uso de conceptos es especialmente característico de la poesía metafísica inglesa del siglo XVII y ha dado el nombre al conceptismo español (véase Barroco Culteranismo y conceptismo), representado especialmente por Francisco de Quevedo y por Baltasar Gracián. La imagen de la ‘plaga’ le sirve a Quevedo para hacer una analogía entre langostas y letrados: "y todos se gradúan de doctores, bachilleres, licenciados y maestros, más por los mentecatos con quien tratan, que por las universidades; y valiera más a España langosta perpetua que licenciados al quitar".
Exclamación
Forma del lenguaje que expresa una emoción intensa como el temor, el dolor o la sorpresa. Se distingue por la entonación a la que normalmente acompañan, aunque no siempre, los signos exclamativos. De Vicente Aleixandre, que ha expresado el valor interjectivo del lenguaje poético, son estos versos: "¡Quién un beso pusiera en esa piedra,/ piedra tranquila que espesor de siglos/ es a una boca!/ ¡Besa, besa! ¡Absorbe!". A Alejandra Pizarnik pertenece el ejemplo siguiente, donde se han eliminado los signos pero su entonación es claramente exclamativa: "Oh ayúdame a escribir el poema más prescindible/ el que no sirva ni para ser inservible/ ayúdame a escribir palabras/ en esta noche/ en este mundo".
Interrogación
La interrogación, desde el punto de vista retórico, es aquella que no se realiza para obtener información sino para afirmar con mayor énfasis la respuesta contenida en la pregunta misma o, en otros casos, la ausencia o imposibilidad de respuesta. Muy frecuente en la poesía de Juan Gelman, como lo demuestran estos versos del poema "Cartas": "¿hay caballos para derrotar al enemigo?/ el que vivió 5 días/ ¿no es un caballo para derrotar al enemigo?/ ¿no está galopando o corriendo ahora entre tus brazos y mis brazos, amada?".
Paragoge
Se considera figura retórica, licencia métrica o expresión coloquial y consiste en añadir un sonido al final de una palabra, así "huéspede" por huésped. Entre otros ejemplos literarios pueden citarse el "Ay mísero de mí/ay infelice" de Calderón de la Barca y los siguientes versos de un texto medieval: "De las dos hermanas, dose,/ ¡válame la gala de la menore!". En español, la paragoge ha sido muy utilizada para la incorporación de vocablos extranjeros que acababan en una consonante extraña en esa posición. así, de club, ‘clube’; de telephon, ‘teléfono’; de diskett, ‘disquete’. A veces, no obstante, se producen incorrecciones tratando de seguir esta tendencia de la lengua española y es considerado un vulgarismo decir ‘fraque’ por frac.
Paronomasia
Combinación de palabras que tienen una fonética parecida pero un significado distinto; por ejemplo, este verso de Francisco de Quevedo: "Con dados ganan condados". Es un recuso muy utilizado en adivinanzas, retahílas, cuentos tradicionales y chistes: "Poco a poco hila la vieja el copo.


Apóstrofe
Mediante el apóstrofe, el hablante interrumpe el discurso para dirigirse a una persona ausente o muerta, a un objeto inanimado, a una idea abstracta, a quienes lo escuchan o leen o a sí mismo. Es frecuente, por tanto, en la plegaria, en los soliloquios o monólogos, en las invocaciones, como en el siguiente ejemplo de Gustavo Adolfo Bécquer: "Olas gigantes que os rompéis bramando/ En las playas desiertas y remotas,/ En las playas desiertas y remotas,/ Llevadme con vosotras".
Clímax y anticlímax
El clímax o gradatio consiste en disponer palabras, cláusulas o periodos según su orden de importancia o según un criterio de gradación ascendente. Es frecuente en las enumeraciones, como en esta estrofa de César Vallejo: "Y todavía,/ aun ahora,/ al cabo del cometa en que he ganado/ mi bacilo feliz y doctoral,/ he aquí que caliente, oyente, tierro, sol y luno,/ incógnito atravieso el cementerio,/ tomo a la izquierda, hiendo/ la yerba con un par de endecasílabos,/ años de tumba, litros de infinito,/ tinta, pluma, ladrillos y perdones".
En el anticlímax o degradatio se da una serie de ideas que abruptamente disminuye en dignidad e importancia al final de un periodo o pasaje, generalmente para lograr un efecto satírico. Como ilustración del anticlímax valga el siguiente fragmento de Enrique Jardiel Poncela hablando de sí mismo en Amor se escribe sin hache: "Gano mi dinero honradamente, con el trabajo de mi cerebro, lo cual es poco frecuente entre gente de pluma (literatos y avestruces)".


Anacoluto
Consiste en abandonar la construcción sintáctica con la que se iniciaba una frase y pasar a otra porque en ese momento ha surgido una idea que se ha hecho dominante, con la consecuencia de una falta de coherencia gramatical. Fue un recurso muy utilizado en la literatura clásica por su expresividad y también es muy frecuente en el lenguaje coloquial: "Yo, no tienes razón porque...", dice alguien en un coloquio al tomar la palabra y expresar su opinión. La frase sintácticamente correcta sería: "Yo no estoy de acuerdo contigo porque...", pero con el anacoluto llama la atención del interlocutor sobre su persona y lo predispone a que lo escuche. Constituye un ejemplo literario esta estrofa de Jorge Manrique: "Aquel de buenos abrigo/ amado por virtüoso/ de la gente,/ el maestre don Rodrigo/ Manrique, tanto famoso/ y tan valiente,/ sus grandes hechos y claros/ no cumple que los alabe,/ pues los vieron,/ ni los quiero hacer caros,/ pues el mundo todo sabe/ cuáles fueron". En esta oración en verso, la frase "Aquel de buenos amigos", que se anuncia como sujeto, seguida de complementos y aposición, queda sin verbo, y se inicia otra cláusula que pone el acento en los "grandes hechos y claros" para dar paso al yo del poeta que, sirviéndose del tópico de la modestia, declara que no hace falta alabarlos ni encarecerlos.

Pleonasmo
Esta figura consiste en utilizar palabras innecesarias, es decir, que no añaden información a la frase, con el fin de enfatizar o realzar una idea, como: "lo vi con mis propios ojos", aunque a veces es una incorrección lingüística: "subir arriba".
Es un recurso muy utilizado en literatura, como "De los sus ojos tan fuertemiente llorando", primer verso del Cantar de mío Cid que enfatiza el llanto del héroe al abandonar su casa camino del destierro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario